Sí. Los padres del niño a ser bautizado deben ser parroquianos registrados de nuestra parroquia de San Esteban. El Sacramento de Bautismo lo introduce a uno en la vida de la Iglesia y de la familia de Dios. Una persona bautizada, a medida que crezca, vivirá la vida de fe en la comunidad en la que es bautizada, participando en la Misa y otras formas de vida parroquial, incluida la educación religiosa. El bautismo también establece una relación con una comunidad parroquial en particular.
En ciertas circunstancias raras, una familia que no está registrada como parroquianos de San Esteban puede celebrar el bautismo de su hijo en San Esteban, pero solo con el permiso del párroco y también con una carta de la parroquia donde están registrados los padres indicando el permiso del párroco apropiado.
Debido a varias circunstancias, a veces los padres retrasan el sacramento. Niños menores de siete pueden ser bautizados siguiendo el mismo proceso de los infantes. Niños de siete años y más han llegado a lo que la Iglesia llama “la edad de razonamiento”. El proceso de bautismo para niños que han cumplido los siete años es un poco diferente. El sacerdote o el diacono se encargará de discutir con los padres este punto.
Estas preguntas surgen más de lo que uno se puede imaginar. El estado matrimonial de los padres no retrasará el bautismo del niño(a). Sin embargo, hablaremos del tema con los padres y se les animará que celebren el Sacramento del Santo Matrimonio lo más pronto posible. Los sacramentos nos dan la gracia de Dios y la falta de esta gracia permite ciertas dificultades a los aspectos cotidianos en el matrimonio y en las relaciones familiares.
Si algún padre no es católico, simplemente se les deja saber que debido al hecho de que el niño(a) será bautizado en la Iglesia católica, el niño(a) continuará creciendo en la fe católica, tendrá que asistir a Misa y ser educado en la fe.
Padrinos de bautismo deben de cumplir con los requisitos que requiere el derecho canónico. Estos requisitos son:
- Tener por lo menos dieciséis años.
- Ha recibido los Sacramentos de Bautismo y Confirmación en la Iglesia Católica.
- Si el padrino o madrina es casado(a), el matrimonio debería de ser valido por la iglesia (no un matrimonio civil).
- Practican la fe asistiendo a Misa los días de obligación y viven una vida moral.
- Los padres de la persona que será bautizada no pueden ser los padrinos.
Los padrinos tienen que obtener un certificado de su párroco que atestigua que ellos cumplen con los requisitos para ser padrinos.
El derecho canónico requiere solamente un padrino para bautismo. Tradicionalmente se escogen dos padrinos católicos y el derecho canónico pide que ambos necesitan cumplir con los requisitos. Además, si se escogen dos padrinos, uno debe ser hombre y el otro mujer.
Personas que no son católicas, pero son Cristianos bautizados son referidos como “testigos cristianos” y pueden ser padrino/madrina con el hecho de que el otro padrino sea católico y cumple con los requisitos. Una persona que no es bautizada no puede ser ni padrino ni un “testigo cristiano”.
Los padres y padrinos son los maestros principales de la transmisión de fe. Como tal, los padres y padrinos deben practicar la fe en sus propias vidas- asistiendo a Misa los domingos y los días de obligación, asistir al sacramento de Confesión cuanto sea necesario y vivir una vida virtuosa. Junto con todo esto, los padres y padrinos deben asistir a las clases de bautismo en la parroquia de San Esteban. Si un padrino no vive aquí, el o ella puede asistir clases de bautismo en una iglesia católica cercana. Se les pedirá un documento para comprobar que han tomado las clases.
Si los padres del niño a bautizar tienen otros hijos y han asistido a una sesión de instrucción bautismal dentro de los cinco (5) años anteriores, este requisito no se aplica a los padres.
No. Los padrinos que han escogido entran en una relación con el niño(a) bautizado y son los testigos del sacramento. Tristemente, a veces sucede que los padrinos no cumplen con su papel adecuadamente. El certificado bautismal es un legítimo documento oficial así que no se le pueden hacer cambios.